Startups: “Contrata rápido, empréndele fuego más rápido” Espera ¿que?…

La lección más importante que obtendrás del mundo startup y los negocios, no es un secreto fundamental, pero guarda secretos que te los confirmará la experiencia y la experiencia te revelará perspicacias que nadie te enseña porque aunque te lo puedan decir, la enseñanza se absorbe en la práctica. Esa lección es que lo más importante no es la página web, ni el logo, ni un pegajoso slogan… lo más importante son las personas de las que te rodeas.

Afortunadamente estoy rodeado de personas talentosas, y también por fortuna me educaron a respetar e interesarme en el bienestar de los demás; y eso me ha brindado oportunidades únicas sin buscarlas demasiado, pero tampoco cayeron del cielo estando sentado viendo la tv y sin hacer nada. Desde el 2006 decidí dejar de ver televisión por completo, igual que en el 2017 decidí dejar de abrir Facebook por completo, tampoco digo que sea pecado, pero cuando enciendas la TV o abras Facebook, más vale que sea por una buena razón; así como tus verdaderos amigos te buscarán dentro y fuera de redes sociales, las verdaderas noticias están en las calles: y está en tí buscar las que te sean relevantes con tus contactos y aquellos servicios de información que tengan una buena razón para estar alineados a tus mejores intereses.
Las oportunidades que llegaron a mí, frecuentemente fueron oportunidades que llegaron a amigos que se acercaron a mí para pedir mi consejo porque yo siempre ayudo, encantado de la vida. Es importante respetar y que te respeten, más que el título en la tarjeta de presentación; al diablo las tarjetas de presentación. Las oportunidades se convirtieron en proyectos y algunos de esos proyectos se transformaron en empresas. Esa es la bendición natural de confiar en los buenos amigos.

En el mundo startup de Silicon Valley existe un lema muy popular que dice ¨Hire fast, fire faster¨, sus beneficios son fáciles de predecir, sin embargo sabemos que el panorama laboral local es distinto. El título de este artículo además de ser clickbait [sorry?], lo concebí para expresar que lo que suena bien en un contexto cultural ajeno no siempre funciona al traducirlo al nuestro… pero eso no nos debería detener de buscar métodos alternos para lograr el mismo beneficio: a mi me gusta ver siempre el ˆcomo síˆ (lo que sea se puede lograr, ¿cómo entonces?) y he diseñado alternativas y estrategias que obtienen los mismos beneficios mitigando los impactos negativos, respetando al trabajador y jamás abandonándolo sino todo lo contrario; los trabajadores como los ciudadanos, a veces necesitan rehabilitación. Estas técnicas y estrategias protegen al individuo, a la vez liberando a una compañía o equipo, retirando elementos que internamente no están dando resultados. Impactando así de manera positiva en la cultura laboral de nuestra industria.

Esta práctica es aceptada sin miedo en Silicon Valley porque entienden que las personas con experiencia fallando tienen mucha experiencia con éxitos no tan evidentes y experiencia con los obstáculos más peligrosos para la salud del ritmo de crecimiento, el veterano es como un viajero en el tiempo que cae en la nueva dimension modificada que es la empresa de alguien más.
Desde que comencé a leer temas al respecto hace ya varios años siguiendo a veces las pistas que Peter Thiel y otras figuras semi-públicas dejan, entendí que la economía de la globalización no nace en cuartos oscuros donde se juntan unos cuantos políticos para hacer acuerdos secretos de dominación y opresión mundial como muchos te quieren hacer creer, la globalización es un fenómeno natural como resultado de 2 poderosos factores combinados, realidades que se dan por otras circunstancias, realidades que se aceptan porque simplemente ya son, ya están y ya existen:

  1. Mitigación de barreras artificiales de control desmedido: Eso que llamamos acuerdos de paz.
  2. Canales internacionales de transporte y comunicación: Eso que llamamos paquetería e internet.

Existe un 3er factor no mencionado porque no cabe en un renglón de misma extensión y no es exclusivo de la globalización, un factor que toca a toda actividad humana y que no se entiende leyendo entregas de apuntes y blogs sino acercándote a personas con experiencia, el factor es la vida misma.
En algún tiempo por mi cuenta me dediqué también a traducir en español algunos textos de Paul Graham para entender con mayor enfoque los retos de importar la cultura Startup, y para absorber la visión de su gente participé en Hacker News del Y-Combinator. Después trabajé en un startup con oficinas en Monterrey y en Mountain View, CA. Un startup que formó parte de la incubadora 500 Startups (Batch 12) y estuve leyendo también las notas de Dave McLure. Curiosamente, la oficina de Mountain View estaba sobre el mismo tramo de calle que la oficina del Y-Combinator, se podía llegar en menos de 13 segundos cruzando al otro lado de la calle y algunos de sus alumni nos visitaron considerando compartir espacio de oficina con nosotros, fueron días emocionantes. La oportunidad de trabajar en CareerDean que después lo convertimos en Wiselike, llegó de la misma manera, por un amigo Freelancer que se acercó a mí para pedir mi guía como negociador, sabiendo que yo ya tenía un poco de experiencia consiguiendo inversionista para un Startup confidencial anterior, pero sobre todo, con la confianza de que yo vería por sus intereses. Entre mis consejos, los de su familia y su propia pericia, consiguió tener el título de Co-Fundador junto con una sustanciosa participación como accionista por sus valiosos aportes primordialmente técnicos desde el inicio del proyecto. Bien dicen que a quien no habla, Dios no lo oye y en el pedir está el dar; hay que saber pedir. Y si no sabes pedir, acércate a quienes te puedan asesorar. No vivas en el mundo de las indirectas, eso déjaselo a los pre-pubertos en facebook; aborda directo y da la cara.

El encuentro entre dos mundos puede provocar un choque destructivo o puede nutrir el entorno mutuo, la clave está en la mentalidad con la que concebimos y adaptamos nuestras estrategias. Los ejecutivos que se juntan a cuarto cerrado para discutir sobre la globalización, no lo hacen para hacer cosas ilegales o porque son malvados, lo hacen para dejar fuera el ruido igual que con la tercera llamada en el teatro. Ruido que a veces proviene de esas mismas personas que piensan mal y todo lo ven mal. Los ejecutivos se juntan para encontrar maneras de que esos mundos no choquen en su encuentro, porque en la globalización no son simplemente dos mundos encontrados, es un asunto de pluralidad y multi-culturas.
Analógicamente con el ciclo del agua, los ríos desembocan siempre en una masa mayor de agua, el movimiento es vida.

Durante mi experiencia en tech startups y otras empresas comprobé que cuando se trata de la productividad de un equipo, 1+1 rara vez resulta en 2, y que en el ambiente adecuado los individuos pueden llegar incluso a multiplicar exponencialmente su desempeño. Encontrar un elemento ideal para tu equipo involucra mucho más que una lista de requisitos técnicos y conocimientos. Y encajar en nuestra cultura es solamente una factor más para quien evita la estrechez de corazón y es capaz de al menos vislumbrar la imagen más completa con una mente abierta.

Withonor es una iniciativa que nació al observar siempre la necesidad de reconciliar culturas y encontrar oportunidades de crecimiento en las diversas transiciones hacia una economía global, la cual no es inminente, no es el futuro, siempre hemos estado dentro; es una realidad natural a la cual la sociedad siempre estuvo destinada.
Y si notaste la triple repetición en este párrafo igual que yo la escribí accidental, significa que eres observador: a los observadores, a esos que han aprendido a leer entre líneas para encontrar a sus semejantes, les recuerdo que todos somos semejantes.
La palabra repetida es ‘siempre’, estar siempre con Dios resulta en estar siempre en vida, no se tarden en sintonizarse con la justicia, recuerden que ¨El tiempo perdido hasta los santos lo lloran¨. Si te vas a meter al teatro cuando ya comenzó la función, hazlo con mucho respeto y el portero en turno podría conseguirte un buen asiento o hasta un pase a camerino. El portero también es tu semejante.

Tengo más textos listos para seguir publicando y saldrán cada tres semanas. Pero tengo lecciones más productivas para compartir en persona y en vida con quienes se han acercado con respeto, merecen mi tiempo. Y mientras sigamos jugando al capitalismo, ese respeto se expresa también con capital y se manifiesta en vida. Para ti, para mí, para los nuestros, para todos. Con la vida no se juega.
Salud para todos los que se han estado acercando y siendo recíprocos al respeto que ofrezco cuando yo me acerco.

Esta fue, la tercera llamarada.
Salud por comenzar y estar siempre prendido.

Jorge Arturo.
Fundador
Withonor



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